Leyendo en la libreta verde de Smemoranda:
Cosas que me gustan (en general):
Las manzanas rojas. La lluvia. Los atardeceres rojos. Las rastas. Una caña, charla y risas en compañía. Los abrazos. Los poetas (Hierro, Salinas, Peri-Rossi, Aleixandre, y algunos más). La música italiana (che ne posso fà?). Ver fotos. Los conciertos. Tocar la guitarra. Mirar a los ojos (aunque me da mucha mucha mucha vergüenza). Leer. Leer blogs. EPS empezando por el final. John Cusack. Piranesi. Roma. Decir paridas. Enamorarme (copiar cien veces "nunca más me volveré a enamorar"). El Barça (ya sé que soy madridista, es algo inexplicable... pero es así). Sentir presencias
("sé bien que a veces sólo quieres sentir las presencias. Quedarte lejos de las
ausencias, no sufrirlas. Huir de lo fútil y vacío. Y quedarse en un mundo
construido por personas que no huyen de los abrazos o de dar la cara").
Escribir. El color rojo y naranja. Hablar de lo visible y lo invisible.
Aunque todas estas se puede resumir en dos: las manzanas rojas y John Cusack.
Cosas que me gustan (de Roma):
La luz. La pizza margherita. Y con brócoli. El acento del sur. Y el toscano. Los botellones (del principio) enfrente del Colosseo. Las primeras noches en Cuccagna. El turismo nocturno. Fontana di Trevi sola e iluminada (impagable). El autobús 93. San Lorenzo. El bar de los chupitos. Tener miedo a veces. Cenar en casa de Magda. El bar de la parra. Nochevieja. Tomar un helado enfrente del Panteón (cuando todo el mundo era bueno). La feria del disco en Cinecittà. La plaza de San Lorenzo con el árbol de Navidad ¡hasta abril!. Viajar. Mis vecinos. El pizzero de Palermo. Álvaro. Los sms de G. El guitarrista del grupo de jazz. Conchita. El picnic en Circo Massimo. Plantar cara. La paella picante en Pietralata. La chica de pelo corto. Laura y sus versos de García Lorca. Ferruccio (el viejo). El Circolo degli Artisti. El concierto de Skin. El 14 de abril en Capri. Las apuestas inverosímiles. Ver a Mari aquí. El concierto tributo a Fabrizio De Andrè. Via Calisse. Los cafés a 0.35 de la universidad. "Las erasmus al sol". El arquitecto-camarero. La comida en la casa de él. Y la cena. Y el partido de baloncesto. Isa. Vestirme de romana en el Palatino. Porta Portese. 25. Los 121 escalones de S. Maria in Aracoeli. Ese cuento que escribí y nunca ganó un premio. El Moisés. You're my lucky star. La enoteca de San Lorenzo (mucha niña mona). El fish and chips. El campio de piso. Raquel y Luci. El chico de la boina. La despedida de Magda. El concierto de la Orquesta de Piazza Vittorio. El Gianicolo de madrugada. Freni e frizioni. El café-librería. Il giardino degli aranci, en el Aventino. Mis gnocchi con pesto (sí, ¿qué pasa?). Las tortillas (olé, olé, olé). Sus abrazos. Las noches de estudio y de Pandoro con Nutella. Todos los locos. La factura de la electricidad (y el vodka negro). Mandar una postal de Positano. Le Cinque Terre. Siena. "Entre copas" en Pisa y Montepulciano. Las camisetas contra la rutina. El cementerio no-católico. Llorar. Botellón en Circo Massimo. El mexicano. Otro concierto. El libro que me/le regaló/é. Comprar ese billete y llorar. Echar de menos hasta el final.
E se ne vanno tante piccole storie... ma poi chissà perchè rimangono in me... soltanto i brividi di lucide memorie...
Editado para decir que... becca, he decidido no llorar más por fuera (que ya estaba llegando al cupo anual). Gracias por, como siempre, estar por ahí vigilando.
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